miércoles, 20 de julio de 2011

La Nazión sigue sin explicitarle su posicionamiento político-partidario a sus lectores

El domingo anticipábamos que la Cadena Nacional de la Gente Linda se iba a escandalizar con la botella de plástico contra Margot en Azul y nada iba a decir sobre el militante kirchenrista baleado en Grand Bourg.
Hoy, La Nazión -especialista en este doble estandar, anclado en el prejuicio de que todo lo K es malo, corrupto, feo y denigrante y todo lo opositor es bueno, noble, lindo y enaltecedor- publica hoy una editorial donde, obviamente, conecta estos hechos con la crispación kirchnerista, con el accionar cuasi dilectivo de La Cámpora y Moyano y termina, a lo Nelson Castro, hablándole a la Presidenta para que gobierne para todos.
En estos días de la vuelta de la Vaca Mansa, está bueno recordar aquellos días donde los escraches contra los patrones del Campo era repudiados con editoriales similares, mientras que las agresiones agrarias contra los dirigentes kirchneristas eran relativizados con el mismo tenor de este párrafo de hoy, cargado y alarmante: "Ninguna sociedad puede vivir en un ambiente de guerra permanente. La Argentina está inmersa desde 2003 en la revancha y el odio contra aquello que el Gobierno elige cada mañana como blanco. Si ayer fueron el campo, los medios independientes y los militares, hoy pueden ser la oposición y el Banco Nacional de Datos Genéticos y mañana puede ser cualquier otro sector de la vida nacional o, incluso, alguna persona en particular. Le tocó ahora a una mujer digna de respeto como la diputada Stolbizer, se piense como ella o no. Puede tocarle incluso a algún candidato oficialista porque, al fin y al cabo, el clima enrarecido es capaz de llevar a cualquiera a vulnerar los límites de la convivencia".
No es un caso más de distinta vara, sino simplemente una expresión más del posicionamiento político-partidario de una empresa periodística que se niega a comunicárselo y transparentarlo a sus lectores y usuarios. Como siempre pedimos, dicho sinceramiento le redundaría en un enriquecimiento de esa relación antes que atacar su ya menguada credibilidad.
Es más. La editorial de hoy comienza con esta afirmación moral: "Es inadmisible en una sociedad democrática que un grupo intente silenciar a otro". Sin embargo, La Nazión nada ha escrito todavía acerca del intento del rabino Bergman de censurar la palabra de un familiar de una víctima del atentado contra la AMIA.
Y siguen los casos. Pasados y futuros. Sólo es cuestión de recordar y contrastar.

0 comentarios:

Publicar un comentario