Leuco Metralleta y Prat Gay esperan el estallido

Se cansaron de esperar. "No puede ser que le salgan todas", refunfuñan, mientras sus relatos de la realidad se desgajan al ritmo cansino del paso de los días hacia el inexorable 23O. Ya ni se preocupan por repetir repertorios narrativos ya gastados, como esperando que esa -por adelantado- aciaga fecha llegue lo más rápido posible. Que acabe esta agonía que sienten es una gastada K en complicidad con Einstein.
Leuco Metralleta: "Por ahora los Schoklender, los Ricardo Jaime, las obras públicas con retornos y sobreprecios no están en la vidriera. Por ahora, insisto. A nadie le importa que los alquileres y los intereses por los plazos fijos que recibió el matrimonio Kirchner sean totalmente fuera de mercado y nadie se explique como hicieron para aumentar su fortuna formidable con esa suerte. Ojalá no tengamos ninguna crisis y la economía siga fuerte y el desarrollo sea sustentable e inclusivo. Eso es felicidad para el pueblo. Pero en algún momento nos tendremos que preocupar por la transparencia y condenar la corrupción".
Prat Gay (¿cómo quién es?): "La economía se maneja sola. Mientras la soja aguante, el gobierno puede seguir en piloto automático. Pero los pasivos del Banco Central en el último año casi se han duplicado, mientras las reservas bajan. La crisis nos puede tocar, no podemos seguir así para siempre. Hoy estamos en un momento dulce. El gobierno pone mucha plata en la calle y eso produce una sensación de bonanza que no va a durar para siempre. Esto ya nos pasó en los 70's y en los 90's. Entonces terminó muy mal, ahora no digo que vaya a pasar lo mismo, porque el mundo nos es más favorable. Pero en un momento esto se tiene que corregir porque no es sostenible".